Notas dulces de calabaza que evocan un pastel de calabaza, combinadas con las dulces notas aromáticas y especiadas del café, que recuerdan a la canela y el clavo. El café brasileño se tuesta ligeramente para mantenerlo suave y con todas sus notas de cereales malteados intactas, mientras que la mayoría de los granos de café colombiano se tuestan brevemente para liberar todos sus aromas más finos. Una suave mezcla 100% arábica a base de granos naturalmente dulces de Brasil y granos lavados de Colombia.